sábado, 28 de marzo de 2009

ENTREVISTA con Eduardo Galeano



Hay otro mundo más allá de la infamia
Edgar Onofre

Dice el escritor uruguayo Eduardo Galeano que hay ocasiones en que se despierta y se siente optimista. “A veces tengo esperanza de 09:00 a 11:00 de la mañana. A las 11:15 se me cae y ni la veo dónde está. Me recupero como a las 15:00 y a las 17:00 vuelvo a perderla.
”No creo en los optimistas full-time (de tiempo completo), me parece que son unos farsantes. Por supuesto, tengo la esperanza de que todo cambie pero también es cierto que mi certeza en las bondades de la condición humana se me derrumba todo el tiempo y todo el tiempo se recupera y resucita”, dijo al día siguiente que llegó a Xalapa para recibir de la Universidad Veracruzana (UV) el doctorado Honoris Causa y participar en el II Encuentro de Escritores por la Tierra celebrado en Xalapa.
En 1971, Eduardo Hughes Galeano escribió “Las venas abiertas de América Latina”, una obra casi inclasificable, para infortunio de los bibliotecarios, que se convirtió en un clásico sobre la explotación de nuestras tierras por parte de potencias extranjeras y en el que se narraba la historia del subcontinente desde una perspectiva diferente a la de los ganadores. “Lamentablemente, el libro no perdió vigencia. Me encantaría que hubiera quedado para exhibirlo en un museo de arqueología”, dijo al respecto.
A “Las venas abiertas…” siguió la trilogía “Memoria del fuego”, “Patas arriba. La escuela del mundo al revés” y más recientemente “Espejos. Una historia casi universal” cuyas ediciones y traducciones se multiplicaron por todo el mundo mientras Galeano conquistaba lectores, abarrotaba auditorios donde quiera que se presentaba y seducía al poder de una forma tal que éste, en reciprocidad, le regaló seis años de exilio, algunas amenazas de muerte –sobre todo en Argentina– y un breve reposo tras las rejas.
“La verdad es que no me pasó nada grave. Tuve algunos problemitas, pero nunca pasó nada importante. Supongo que estoy protegido por Dios, porque creía en Él, fervorosamente, y probablemente no lo olvida: cuando yo era niño, era muy místico. Y supongo que estoy protegido por el Diablo también, con quien me he divertido muchísimo después”, dijo al respecto.

El efecto Galeano, en Veracruz
Anduvo merodeando en Xalapa durante seis o siete días, visitó el Museo de Antropología y no pudo zafarse de la prensa. Los medios locales andaban locos por entrevistarlo y publicaron lo que pudieron. En el Distrito Federal saturaron su agenda y los medios de la capital mandaron emisarios a la provincia para tratar de entrevistar a este crítico de los expertos latinoamericanistas que cometen “el nada inocente pecado de bajar del avión, estar 15 minutos en tierra y escribir un libro de 700 páginas explicando lo que nos ocurre”.
Abarrotó el auditorio de la Unidad de Humanidades como no se había visto en mucho tiempo y su discurso fue, naturalmente, consecuente donde quiera que se presentó. Desde el bar del hotel en que se hospedó hasta el discurso de aceptación del grado de doctor Honoris Causa, defendió la profunda diversidad de la región como una de sus más afortunadas características y festejó los pequeños pasos hacia delante que ha dado América Latina como grandes pasos:
“Que Evo Morales logre que los mal llamados curanderos, los médicos indígenas, puedan entrar a los hospitales, donde tenían la entrada prohibida, y reciban el mismo respeto que los médicos que egresan de las facultades de medicina, es un gran paso.
”Que Ecuador establezca en su Constitución que la naturaleza tiene derechos, los derechos de la naturaleza, es un gran paso. Pasa por primera vez en la historia, a nadie se le había ocurrido que la naturaleza tiene derechos. El mundo está lleno de juristas, las facultades de derecho fabrican millones de abogados –que en esos países andinos son casi todos vampiros de indios– y a ninguno se le había ocurrido que la naturaleza podía tener derechos. “¿Para qué, si nosotros la cuidamos?”, decían. ¿La cuidamos? ¿Qué queda de la pobre, exprimida como un limón?”.

Podría pasarme a la derecha, pero nadie me va a creer
Es sabido que nunca ha sido muy condescendiente que digamos con la demencia de los gobernantes y no hay muchas razones para pensar que vaya a cambiar. Mucho menos se espera de él una sorpresa tránsfuga o un artero bandazo. Dice, con sorna, que no le han llegado al precio: “Nadie me ha dado una cifra interesante hasta ahora. Me han ofrecido, sí, pero bagatelas”.
Se conoce también que Álvaro Vargas Llosa escribió su best seller “Manual del perfecto idiota latinoamericano” como una respuesta a “Las venas abiertas...”. El peruano tuvo la fortuna de que su título se convirtiera en éxito de prestigiadas librerías de nuestro país como Vip’s y Sanborns y fue prologado por su señor padre, Mario Vargas Llosa, quien con el tiempo terminó aplaudiendo la guerra en Irak.
“La izquierda es la universidad de la derecha. Mucha de la gente que ejerce el poder de muy mala manera en el mundo de hoy fue formada por los mismos libros que me formaron a mí. Algún día descubrieron que era más conveniente pasarse al otro lado”, comentó Galeano.
“Yo lo haría también, pero después de tantos años nadie me va a creer. A veces tengo la tentación. Mañana hago una conferencia de prensa y digo: “Descubrí que estaba equivocado. Pasa que no había leído bien a Margaret Thatcher y no había podido conversar a fondo con Condoleezza Rice ni con Bush. Y estoy declarando públicamente mi arrepentimiento”. Yo podría hacer eso, lo que pasa es que nadie me va a creer, por eso no lo hago. La gente va a decir: “Éste comió carne de vaca loca”.
Sin embargo, parece que el tiempo se ha encargado de pasarle factura. Galeano cuenta que algunos amigos suyos leyeron la historia de Olympia De Gouges que registró en su último libro, Espejos, y lo felicitaron:
“En este libro hay numerosas historias de opresión femenina. Estamos acostumbrados a identificar la opresión de la mujer con el mundo religioso pero el mundo laico tampoco se portó demasiado mejor.
La Revolución Francesa le cortó la cabeza en la guillotina a una mujer revolucionaria que se le ocurrió proponer una Declaración de los Derechos de la Mujer y de la Ciudadana. Olympia de Gouges redactó la declaración con toda razón: las mujeres no tenían ningún derecho. No sólo no podían votar, no podían hablar, no podían moverse sin permiso del marido, y los revolucionarios le cortaron la cabeza en la guillotina. Para que aprendiera. No sé si aprendió, pero seguro fue con una intención pedagógica que lo hicieron.
”Pero cuando escribí esta historia los amigos que lo leyeron me dijeron: “Qué bien que denuncies todo eso que pasó. Te felicitamos y queremos decirte que nos conmueve que el sistema, en su infinita perversidad, te regaló a Condoleezza Rice, que es negra y mujer. Y queríamos felicitarte por esa conquista tuya, porque te pasaste toda la vida jodiendo con la historia desconocida del África de los negros peor tratados del mundo y reivindicando a las mujeres y ahora tienes a los dos en uno. Mira qué suerte”. Mis amigos tienen una mala leche…”

Galeano hizo su magia
Galeano hizo su magia y sedujo a sus auditorios. Lo mismo en su escritura que en persona, su sentido del humor, irónico y simple al mismo tiempo, hace brillar su crítica. Habla hasta divertido de los temas más delicados. Considera que las libertades son todavía una tarea pendiente, que “el mundo nace de nuevo cada día” y que la primera tarea sería la de perder el miedo: “Luchar contra el miedo me parece una tarea lindísima e imprescindible.
”La vida no es una sola vida: los seres vivos viven varias vidas a lo largo de una vida y deben volver a nacer y tienen la libertad de hacerlo pero, a veces, las jaulas que lo impiden pueden más y la mayor parte de la humanidad nace prisionera, presa de jaulas visibles e invisibles: el hambre, la necesidad, la miseria son jaulas bastante visibles. Y hay otras invisibles como el miedo, que no siempre se ve pero que también ejerce su dictadura en el mundo y es el principal enemigo de la libertad. El miedo en América Latina, invisible, nace de una tradición de la impotencia, el miedo de cambiar, de ser, de hacer, de recordar, el miedo de decir, son nuestros principales enemigos”.
Galeano fue amigo de dos atormentados escritores latinoamericanos: Juan Carlos Onetti y Juan Rulfo. Algo intuye sobre la angustia y la depresión cuando dice: “Estamos hechos de barro, somos imperfectos, somos la mitad mierda y la mitad maravilla. Todos. Blancos, indios, negros, mujeres, homosexuales, heterosexuales, todos. Hay que ver qué mitad predomina y, sobre todo, cómo podemos organizar al mundo para favorecer la maravilla y desalentar la mierda.
”Todo depende de lo que te estimula o te obligan a ser. Por ejemplo, si te obligan a ser un canalla para obtener o conservar un empleo, si para poder mantener a tus hijos te obligan a emputecer tu alma, bueno, ahí la parte jodida, la mitad mierda, ahoga a la otra. No es cierto que el marco social no tenga nada que ver, mucho depende de lo que la sociedad te obliga a ser: si te enseña que para triunfar en la vida tienes que cagar al vecino, si te enseña que perder está prohibido y ganar es obligatorio, y que todo está permitido con tal de ganar, ya de entrada estás jodido. Por más buenas cosas que traigas dentro.
”Después resulta que un tipo que era macanudísimo asesina a 17 o se convierta en un monstruo que golpea a su mujer. El marco social no es el mejor. El “way of life” al que Barack Obama dice que nunca renunciará es una porquería porque es cultura del consumo que te enseña que más vale el que más tiene. Y es cultura de la violencia que dice que naciste para salvar a los demás y que para salvarlos tienes que matar. Y se pasan invadiendo países para “llevar la democracia”, como decían Vargas Llosa y una buena cantidad de intelectuales en el mundo a los que les pareció maravillosa la idea de masacrar iraquíes”.
Considera que los jóvenes se han vuelto más violentos porque no se reconocen en el mundo que heredan. Veamos, por ejemplo, el descrédito de la democracia en casi toda América Latina. Según las encuestas más serias, la mayor parte de los jóvenes no cree en la democracia ni le interesa para nada participar en ella. No se reconocen. Y ésta es responsabilidad, sobre todo, de los políticos, quienes han pecado contra la esperanza y que han desprestigiado a la democracia, haciendo desde el poder todo lo contrario a lo que desde el llano prometen”.

La palabra tiene cada vez menos crédito
Galeano dice que el mundo de hoy ha traicionado al diccionario. “Por ejemplo: “Comunidad internacional”. Una palabra hermosa que ahora se usa para definir a un club de banqueros cigarreros.
”’Mercado’ era una palabra muy bella cuando yo era chico. El mercado del barrio era una fiesta para mí, como un circo. Y ahora el “mercado” es un señor todopoderoso que decide la catástrofe mundial con total impunidad. La palabra “socialismo” también ha sido desprestigiada por el mal uso que se ha hecho de ella: la socialdemocracia la usó como pseudónimo de un capitalismo maquillado y el comunismo la usó para bendecir la dictadura de la burocracia fingiendo que era dictadura del proletariado.
”La palabra tiene cada vez menos crédito en el mundo. Según los guaraníes “palabra” y “alma” se dicen de la misma manera. “Ñe-é” significa palabra y también alma. Si te doy mi palabra, te doy mi alma. Esta es mi palabra, éste soy yo. Esa visión del mundo que la cultura guaraní supo perpetuar a través de su lenguaje hoy no tiene mucho éxito que digamos.
”Las expresiones humanas se han reducido muchísimo hasta llegar a la expresión más jodida de todas, que es la relación entre mercancías: “Dime cuál es tu precio y te diré cuánto vales”. Antonio Machado, gran poeta español, decía: “Ahora cualquier necio confunde valor y precio” y parecía hablar del mundo de hoy. Y también Shakespeare, en Rey Lear, cuando dice: “El drama del mundo es que los locos conducen a los ciegos”, parece del 2009”.

Las utopías no están muertas
Según su parecer, la fuerza del aparato hegemónico de poder se ha visto muy debilitada por la reciente crisis que más que financiera lo ha sido del capitalismo, aunque advierte que “sigue siendo un mundo desigual”.
Critica a la izquierda, pero no desde parvularios argumentos, sino desde el humanismo: “La izquierda ha estado bastante enferma de grandilocuencia. Su lenguaje ha sido muy grandilocuente y por ahí hay que volver a la humildad de las cosas chiquitas, de la vida sencilla, la humilde luz de la vela. Esos son valores capitalistas que la izquierda practica sin saberlo. Hay que cambiar esta confusión de la grandeza con lo grandote, las grandes palabras, la retórica y la idea de que el mundo va a cambiar en una suerte de gran hecatombe, un Apocalipsis. Por ahí el mundo cambia de a poquito y los pasos que da a veces ni se notan”.
En el mundo que Galeano descifra los fariseos que se rasgaron las vestiduras y pontificaron el fin de los ideales, del socialismo, del humanismo, de la historia y del hombre erraron.
“Si creyera que las utopías están muertas, que no tiene sentido clavar los ojos más allá de la infamia para adivinar otro mundo posible, no estaría charlando contigo ahora. Me dedicaría a hacer filatelia. Me parecería muy tramposo si hablara de estas cosas y no creyera que hay otro mundo posible. El mundo está embarazado, tiene otro mundo dentro de la barriga. Si no lo creyera, tendría la honestidad del silencio, supongo: no hablaría ni escribiría”.


Foto: Departamento de Prensa de la Universidad Veracruzana


lunes, 23 de marzo de 2009

ARTÍCULO sobre el consumo de jóvenes en Veracruz


Sonrieron cuando se les preguntó cuánto gastan en libros


Cifras sobre tendencias
de consumo de los jóvenes


Nancy Alejandra Ortiz Ochoa, socióloga y educadora

Pese a las diferencias económicas sustanciales entre los países económicamente más desarrollados y los de economías llamadas emergentes, como el caso de México, nuestra sociedad se las arregla para vivir el tipo de vida de consumo que corresponde reproducir en este sistema capitalista.

Atribuidas principalmente a las sociedades de los países ricos, las prácticas consumistas cada día están más arraigadas en nuestra sociedad y son los jóvenes los principales reproductores de esta manera de vivir, toda vez que están más expuestos a los cambios y procesos globalizadores.

En el marco de una investigación realizada en la Facultad de Sociología SEA, se aplicó una encuesta a jóvenes de 15 a 25 años dentro del centro comercial Plaza Las Américas en Boca del Río, Veracruz, acaso el centro comercial más frecuentado del estado, con la finalidad de recoger tendencias de consumo.

La encuesta arrojó los siguientes resultados. Por lo menos 40 por ciento de los entrevistados aseguró que visitaba el centro comercial más de una vez a la semana; 45 por ciento dijo que ahí realizaba actividades como pasear, mirar, comprar, comer, estar en el café o en el cine; 70 por ciento, relacionó la visita al centro comercial como parte de un paseo o divertimento.

Los jóvenes sondeados aseguraron que consideraban el centro comercial como un lugar de suma importancia en la zona conurbada y la relacionaron con el turismo, la vida y el divertimento de los veracruzanos porteños. Incluso opinaron que el centro comercial debía ser más grande, tener otro tipo de espacios de diversión como boliche, pista de hielo, gotcha (juego con pistolas que tiran bolas de pintura), etcétera.

Respecto de sus hábitos de consumo, 85 por ciento dijo que le gustaba estar a la moda, aseveración que incluso realizaban esbozando con una gran sonrisa como para, a juicio personal, avalar la veracidad de sus palabras.
Un 70 por ciento dijo que para estar a la moda compraban objetos, ropa o zapatos. La mayoría de los sondeados dijo inspirarse en revistas para observar lo que se usa en otros países, algunos copian a figuras del espectáculo, otros imitan a familiares, amigos o gente en general y sólo 10 por ciento aseguró no interesarse por la moda.

95 por ciento de los encuestados aseguró gastar dinero en ropa cada mes. El gasto iba desde 100 hasta seis mil pesos; 45 por ciento dijo gastar alrededor de mil pesos por mes en ropa; 25 por ciento, alrededor de dos mil, pero otro 25 por ciento aseguró gastar más de tres mil pesos en prendas de vestir. Este dato resulta curioso, pues muchos dijeron gastar la misma cantidad en diversiones.

Si partimos del supuesto que las respuestas fueron contestadas de manera verídica, eso significaría que algunos jóvenes veracruzanos de clase media invierten una buena cantidad del ingreso de sus padres (unos seis mil pesos mensuales) en ropa y diversiones, lo cual nos habla de la búsqueda de satisfactores inmediatos como la adquisición de objetos y la valoración de prácticas hedonistas, actitudes típicas de las sociedades de consumo.

Ahora bien, si los datos proporcionados hubieran sido falseados o exagerados, queda entonces en evidencia el gran interés que hay en un sector de la población por aparentar poseer más de lo que se tiene, una actitud típica de las sociedades de consumo donde se adquiere para ser, parecer o pertenecer.

Otro dato revelador es que 65 por ciento de los jóvenes encuestados, en su mayoría estudiantes, dijo no gastar en libros, revistas, periódicos o discos. Sólo 35 por ciento gasta en este tipo de artículos y las cantidades expresadas iban desde los 30 hasta menos de mil pesos. Como dato anecdótico, queda registrado que muchos de ellos se sorprendieron con la pregunta y no contemplaban la posibilidad de gastar su dinero en un libro.


artículo publicado en: http://www.uv.mx/universo/349/infgral/infgral_32.htm

jueves, 19 de marzo de 2009

DISCURSO sobre la locura


Otro mundo es posible


Nancy Alejandra Ortiz Ochoa, Educadora y Socióloga


Muchos nos tratan de locos porque creemos que vivir en un mejor país es posible. Para muchos somos idealistas porque pensamos que un cambio puede ser realidad. Para otros sólo somos soñadores porque confiamos en la unidad de la gente.

Hay quienes influenciados por los medios opinan que queremos desestabilizar el país. Yo les contesto, si por desestabilizar se entiende que queremos que los gobernantes actúen en beneficio del pueblo, de su pueblo, si, sí queremos desestabilizar el país. Sí desestabilizar el país es señalar lo que está mal y lo incorrecto. Es verdad, queremos desestabilizar el país. Si ser agitador significa que exigimos lo justo, mejores condiciones para vivir, políticas públicas que beneficien a la mayoría de los mexicanos y no sólo a un grupo de amigos del poder que se enriquece a costa de nosotros, ¡Me declaro culpable!, Soy una agitadora que exige mejores condiciones de vida, que exige gobernantes que no ganen 200 mil al mes mientras otros ganamos el salario mínimo. Me acuso de ser una agitadora y desestabilizadora del país junto con todos los que hoy están presentes, ya que todos queremos que nuestras empresas trabajen en función de la economía de todos, porque queremos que se deje de favorecer a los amigos del presidente, que se deje de dar contratos y prebendas que sólo beneficia a un grupo corrupto voraz y ambicioso. Todo a costa de la economía de los mexicanos. A costa del bienestar social. A costa de la gente más pobre.

Hoy nos encontramos reunidos porque exigimos tarifas de electricidad justas y congruentes con el salario de la mayoría de los mexicanos. Sabemos que eso es posible. Exigimos que se deje de comprar energía a empresas extranjeras ya que ese es el motivo real del encarecimiento de la electricidad. Exigimos que nuestras empresas trabajen en función del pueblo y que el gobierno pare su política neoliberal.

Mientras otros países están evitando el modelo neoliberal causante de la crisis económica mundial y están nacionalizando las empresas, incluso lo está haciendo Estados Unidos. Los gobernantes en México siguen “pensando” que es el modelo que debemos continuar. Cuando todos sabemos, y hay estudios serios que lo corroboran, que éste modelo es el causante del empobrecimiento de México y del mundo en los últimos 25 años.

Pero los gobernante no son tan tontos como parecen, ellos saben lo que está pasando, la causa y la consecuencia. Pero no les interesa, no les interesa porque ellos se hacen ricos mientras nosotros nos hacemos pobres, porque resulta que son sus empresas las que se están beneficiando, porque resulta que ellos reciben grandes compensaciones por cada política pública que aprueban. Ellos no están ahí para mejorar las condiciones de los mexicanos, están ahí para hacerse ricos cada día.

Cómo puede importarles el pueblo de México cuando jamás han conocido la miseria, cuando nunca han vivido en una colonia sin pavimentar, cuando nunca han vivido en una comunidad sin agua, transporte o electricidad, cuando nunca han pasado hambre, cuando nunca han visto morir a un niño por desnutrición, cuando siempre han tenido más de lo que necesitan, cuando han estudiado o vivido en el extranjero. Incluso, son hijos de extranjeros o nacieron en otro país.

Hoy, exigimos que los que ostentan el poder tomen medidas inmediatas para mejorar la economía de los mexicanos. Que asuman la responsabilidad que ellos mismos se otorgaron y tienen con este pueblo.

Y sí, quizá estamos locos, como en su tiempo lo estuvo el cura Hidalgo, Villa, Juárez o Zapata.

Sí en éste mundo no existieran personas locas que creen que existe otra mejor manera de vivir, el mundo jamás hubiera cambiado. Seguiríamos en la época de esclavos, de la colonia, de racismo, del abuso y la dominación. Hoy nos encontramos ante otras maneras de dominación, ante nuevas maneras de abuso y esclavitud. Afortunadamente hay personas locas como yo, y como los que hoy están presentes, que creemos que otro mundo es posible.


Discurso pronunciado en protesta por las altas tarifas eléctricas el 17 de Febrero de 2009 en Veracruz, Ver.

lunes, 16 de marzo de 2009

ENTREVISTA a Jesusa Rodríguez


“Sí hoy día en México no se es un artista social, yo creo que ya no se es un artista”: Jesusa Rodríguez


Por Nancy Ortiz y Oracio Barmez


Era la 1:30 de la tarde cuando la Actriz y Activista social Jesusa Rodríguez inauguró La Casa en Movimiento de Veracruz-Boca del Río. Estás casas se están inaugurando en todo el país con la finalidad de ser un referente físico del Gobierno Legitimo, movimiento social que lidera Andrés Manuel López Obrador.

Las casas tienen la finalidad de dar asesoría legal, jurídica y económica a personas con problemas financieros, bancarios o de alguna índole similar. Además de promocionar actividades culturales y económicas a través de la producción y autoconsumo popular, señaló la invitada de honor.

Jesusa Rodríguez, quien vestía ropa de manta y sonrisa agradable, dijo que estas casas eran muy importantes para el movimiento, ya que con ellas se plantean acciones reales que van a repercutir en la ciudadanía y finalmente en la transformación del país.

También exhortó a los promotores de la casa alejarse de actividades partidistas y por el contrario promover acciones que repercutan más en la ciudadanía. También se manifestó muy contenta y motivada de que cada día más gente se una al movimiento, ya que aseguro que sólo así se lograría una transformación real en el país. “Basta de quejarnos de lo mal que está el país en todo, eso ya no sirve, lo importante es la acción”, puntualizó.

El evento transcurrió de manera organizada, al finalizar mucha gente aprovecho para tomarse fotos con ella y pedir autógrafo. El equipo de Actores Sociales le solicitó una entrevista, amablemente accedió y esto fue lo que nos dijo:


¿Cómo te involucras en el movimiento?


Bueno, esto empezó desde el desafuero, porque ya sentíamos que era una injusticia muy evidente. Pero, obviamente en el momento del fraude es cuando decidimos involucrarnos el mayor tiempo posible a trabajar voluntariamente para este movimiento.


¿Qué opinas de los intelectuales que en algún momento apoyaron a Andrés Manuel, pero ya pasando el proceso poselectoral, se abren?


Para decirlo de una forma intelectual académica, que son culeros. (risas)


En la historia de la humanidad los artistas siempre han sido contestatarios, han estado a la vanguardia, son los que piensan un mundo diferente y los que general cambios. Pero, en este momento en México, ¿Qué opinas de los artistas? ya que muchos si apoyan, pero otros andan en ondas individualistas ¿qué opinas de eso?


Bueno, yo creo que la gran diferencia es que en este movimiento a la vanguardia está la gente más humilde. Y los artistas se quedaron atrás. Los artistas están papando sus moscas pa´ tragárselas ellos solos y la vanguardia creativa, los verdaderos artistas de México en este momento son los artistas del pueblo, que es lo más importante, además yo creo que son más valiosos que los dizque artistas.


También quisiéramos preguntarte un poco acerca del movimiento feminista, hace poco leyendo un libro llamado “Feminismo” de Marta Lamas, ella hacía algunas observaciones del movimiento feminista latinoamericano, daba sus apreciaciones del porque no había avanzado ¿Qué opinas al respecto?


Yo creo que mientras vivamos en un país donde se violan a las mujeres a los niños y a las niñas, no hemos avanzado un gramo en cuestión de lucha feminista. Todavía el rezago para las mujeres indígenas y pobres es brutal. Si, el avance feminista en México ha sido pa´ las mujeres de clase media pa´ arriba. Todavía no existe justicia para las mujeres en México.


¿Y que tendríamos que estar haciendo?


Lo que estamos haciendo, trabajar desde abajo y yo creo que las que verdaderamente lo están haciendo, son las mujeres indígenas, las mujeres campesinas, que empiezan a defenderse ellas solas.


Hay muchos lugares donde las mujeres indígenas están siendo lideres, haciendo organizaciones…


Oracio Barmez: Ó comitivas, están haciendo proyectos, que se general a partir de la misma comunidad para abrir brecha ante el capitalismo. En las empresas grandes se esta hablando de oprimir a estas masas. Son las mujeres las que están liderando estas nuevas alternativas.


Jesusa Rodríguez: Esos es lo que yo pienso, que el verdadero movimiento feminista en México lo están haciendo las indígenas campesinas.


Pedimos a Jesusa que mandara un saludo a los Actores Sociales

Un saludo muy grande para Actores Sociales, porque si hoy día en México no se es un artista social, yo creo que ya no se es un artista. Jesusa Rodriguez.


Foto: Nancy Ortiz

viernes, 13 de marzo de 2009

CUENTO sobre la burocracia


Un día en la vida de un burocrata



Por Marco Arturo Montero, sociólogo, actor y poeta

Eran las seis de la mañana con veinticinco minutos cuando sonó el despertador de Toñito, así le decían todos en la oficina, solo los de la sección de pagos y su jefe sabían su nombre completo, Antonio Reyes López, la mayoría lo conocía como Toñito el de las copias, llevaba veinte años trabajando en la oficina de hacienda de la ciudad de Puebla y también veinte años despertándose con el mismo sonido del despertador electrónico de quince pesos. Se levantó de la cama sin despertar a su mujer como todos los días, de manera automática se desplazó hacía el baño donde enjuago su cara y vio pasar por el espejo del lavabo la silueta también en automático de su mujer que se deslizaba a la cocina para preparar el café, los huevos y el pan de todas las mañanas, comenzó a rasurarse como todos lo días y fue entonces cuando Toñito recibió la señal y un hilo de sangre escurrió por su mejilla, desde su adolescencia no se había cortado al rasurarse, vio caer una gota de sangre en el lavabo y tomo un poco de papel que oprimió contra su mejilla, no tardo mucho el sangrado, termino de rasurarse y se deslizo hacía la recamara donde ya estaba sobre la cama la ropa que se iba a poner, Toñito haciendo caso omiso de ella fue hacía el closet y tomo unos jeans de mezclilla y una camisa que solo ocupaba en ocasiones especiales, saco del cajón la colonia alemana que guardaba celosamente y se baño con ella haciendo arder la herida de su cara provocando una exhalación de satisfacción que le hizo sonreír, se dirigió a la cocina, vio el café, el pan y los huevos, hizo una mueca de negación y se dio la media vuelta ante la mirada estupefacta de su mujer que le decía -anda toño tu desayuno que llegarás tarde al trabajo-toño-¿qué te pasa?-... eso fue lo último que escucho Toñito que ya se enfilaba calle abajo a tomar la micro de siempre, llegó a la esquina justo cuando se detenía el microbús, Toñito miro al chofer mientras le gritaba -¿sube o no?-, -carajo- Toñito levanto el dedo de en medio de su mano y dio la vuelta en sentido contrario a su trabajo, solo escucho el pentatónico sonido de la bocina del microbusero que dio un arrancón y más de uno de los pasajeros fue a dar a la parte trasera del microbús. Toñito se puso a recordar que tenía que entregar treinta carpetas al director de personal y hacer doscientos juegos de los nuevos formatos r-3 que le habían encargado, ya escuchaba la voz del licenciado Ferrer, -chíngale Toñito, que son para hoy-, mientras él tenía que hacer que funcionaran esas copiadoras viejas que a cada rato atoraban las hojas o manchaban de tinta las copias, -ya quisiera tu trabajo Toñito-,-nomás pura güeva verdad¨-. -Que chinguen a su madre- dijo en voz alta haciendo saltar a una señora que pasaba apurada con un niño de uniforme escolar que soltó la carcajada y luego vio con miedo a su mamá ante su inquisidora mirada, Toñito sonrió por enésima vez en esa mañana y decidió entrar al vips que se encontraba a su paso, todavía tenía tiempo de desayunar y entrar a la oficina, mmm, pidió unos hot cakes un jugo de zanahoria grande y un coctel de frutas con yogurt, sabores que ya solo tenía en sus recuerdos, Toñito miro el pecho de su mesera que decía Miriam,-Miriam, bonito nombre- ella era una mujer más bien regordeta, con hoyuelos en las mejillas y una linda sonrisa, sus ojos marcaban un poco de cansancio y por sus facciones podría tener unos treinta y cinco años no llegaba a los cuarenta, quizá menos de treinta y cinco, -gracias-contesto la mesera, -yo me llamo...to...Antonio-,-estoy para servirte Antonio- , fue algo mágico, escuchar su nombre, ya no recordaba como se oía en voz de otra persona y menos en una voz tan dulce como la de Miriam, Toñito se puso a hojear un periódico que había tomado a la entrada y mientras leía un artículo llamado "el tiempo perdido" sin estar completamente metido en la lectura pensó en los pechos de Miriam y los orificios de sus mejillas, se sonrojo, nunca había sido infiel, no de esa forma, habían pasado algunas putas que servían de desahogo de sus ansias de hombre y eran ya parte de esa rutina que lo había atrapado en algún momento y de la cual no podría escapar, -con permiso señor-, -le dejo sus hot cakes, quiere miel o mermelada- dijo Miriam mientras servía,-deja de las dos- contesto Toñito, -algo más-pregunto Miriam, -si se pudiera que desayunarás conmigo Miriam, pero no se puede-contesto él, Miriam sin molestarse sonrió a Toñito, -gracias Antonio- solo eso dijo y desapareció, Toñito termino su desayuno como un niño recién salido del orfanato hubo tanto gusto en este acto que casi había olvidado que era un día de trabajo que tenía que continuar con lo habitual, lo establecido, que necesitaba ganar el pan de todos los días, que..., -¿más café señor?, yo ya me retiro lo atenderá mi compañera-, dijo Miriam interrumpiendo su regreso a la realidad, Toñito la miro a los ojos y le sonrió de una forma tan cómplice que ella solo pudo contestar el gesto -me gustaría poderte acompañar, no tengo nada que hacer y pues...-,-salgo en 15 minutos por la puerta de servicio, espérame- dijo Miriam sin dejarlo terminar -¿más café?-pregunto, -sólo para 15 minutos- contesto él. La espero en la puerta trasera, ella salió vestida con unos jeans de mezclilla una blusa azul y una chamarra de mezclilla, se veía muy jovial, pero también se acentuaba su melancolía que no podía disimular a pesar de su sonrisa con hoyuelos, -vivo cerca, caminemos te parece- sugirió ella,- me encantaría-contesto él, llegaron a un conjunto habitacional, subieron dos pisos y ella le invito a pasar, -¿gustas otro café Antonio o te puedo invitar un refresco o cerveza?-, Toñito estaba como en un viaje y pensó "a la chingada Ferrer, hacienda y la pinche copiadora" y se dejo llevar, quizá ese día sería como un oasis en su monótona vida. -Te acepto la cerveza gracias- dijo, -yo también tomaré una, me permites voy a cambiarme los zapatos no tardo-, Tonito bebía su cerveza cuando ella regresaba con la suya en la mano, hicieron un brindis por conocerse y ella se sentó junto a él, -no se que vi en ti, pero no me importa que vayas a pensar de mi, estoy sola y tú te ves perdido o ¿no se? triste, nunca lo había hecho, pero me deje llevar, no quise decirte que no y ahora ya ves, estamos aquí y no sabemos ni quienes somos ni...-, -no importa- interrumpió Toñito y la beso e hicieron el amor hasta medio día, -tienes que dormir, mañana trabajarás- dijo Toñito y le dio un beso, un beso con sabor a último-¿no nos volveremos a ver?- dijo ella, -No, no nos volveremos a ver- respondió Toñito, se dirigió hacía la puerta de salida y se fue sin mirar hacía atrás, sabía que en algún momento terminaría esté día y solo quería vivirlo, hacía tanto que no vivía. Abandonó la casa sin volver la mirada en ningún momento, porque sabía que si recordaba el camino volvería y jamás se iría y aún no se sentía con el valor de abandonar todo aunque ese todo fuese su lápida en vida. Decidió seguir caminando y confiar en el destino, estaba viviendo...simplemente eso tenía, un lapso de vida en su mortecino existir. No había caminado ni dos kilómetros cuando escucho el timbre de su celular, miró el número y lo dejó sonar... sonar... hasta topar con un limosnero que estaba recargado en una pared con un letrero de cartón que decía "desempleado por culpa del pinche gobierno"... Toñito le arrojo el celular y le dijo -conteste, se lo regalo, dígale a Ferrer que le cedí mi chamba- y se alejo ante la mirada de sorpresa del indigente, siguió hasta chocar con una manifestación que exigía justicia ante los injustificados impuestos a los trabajadores independientes, sin darse cuenta Toñito ya estaba en la bola, comentaba y discutía con los inconformes y se hacía parte de la manifestación, la protesta se hacía cada ves más violenta y él embriagado por el momento patea la puerta del edificio frente al que protestan, los granaderos empiezan a dispersar a la gente y a golpearlos, en seguida el levanta la vista y ve a Ferrer del otro lado de la puerta de cristal, estaba frente a la oficina de hacienda, su jaula, su trabajo, ¿hacía donde más pudo haber caminado? él ya no conocía otra ruta... de pronto todo se nubla, desaparece, la macana de un policía cae sobre su sien y en los encabezados de los periódicos "empleado de hacienda muere al intentar llegar a su trabajo y encontrarse con una manifestación, el pobre hombre de nombre Toñito había sido asaltado previamente por un indigente..."


Imagen tomada de: www.brunoferias.com

sábado, 7 de marzo de 2009

ARTÍCULO sobre carrera magisterial


BARRERA MAGISTERIAL


Por Nancy Alejandra Ortiz Ochoa, Educadora rural y Socióloga


Acaban de pasar los exámenes de Carrera Magisterial, la mayoría de los maestros lo llamamos “Barrera Magisterial”. Platicando con algunos compañeros coincidimos en lo mal diseñados que están los exámenes: mal redactados, hechos para confundir a los docentes, con preguntas y respuestas incongruentes. El contenido responde más a intereses políticos que a una verdadera evaluación del trabajo de los docentes.

Resulta que hay algunos docentes con alto nivel en carrera y son maestros faltistas, que no cumplen o que hacen mal su trabajo, y habemos otros que no faltamos, trabajamos las jornadas completas, las reuniones con padres o talleres los hacemos fuera del horario de trabajo, tratamos de prepararnos, de ser responsables, de implementar acciones que verdaderamente sean significativas a los alumnos y resulta que ni siquiera pasamos el examen. Lo más ilógico es que cada año sacamos menos calificación cuando se supone que los contenidos que te evalúan son los mismos.

Es sabido por todos los maestros que los exámenes se venden antes de su aplicación, incluso yo misma una vez rechace comprar las respuestas del examen pues me parecía poco ético, también se sabe que hay personas que te ingresan al programa por una fuerte suma de dinero.

Los que tratamos de ingresar por la vía legal cada día la tenemos más difícil, por un lado es competir con los docentes que llevan ventaja al tener las respuestas, otra competir contra los que ya pagaron por ingresar y la no menos importante es poder descifrar esos exámenes que están diseñados para reprobar al mayor número de maestros. Son exámenes que no van acorde con los paradigmas educativos de hoy en día, pues se basan en una absurda memorización, donde incluso debemos sabernos la página de ciertos libros u otras cosas que no ayudan ni contribuyen en nada en una verdadera educación.

Aunado a todo eso, la SEP y la SEV han implementado una serie de medidas mal diseñadas y planeadas para evaluarnos, resulta que no hay información oportuna y veras, los cursos se resumen a decir que los maestro debemos comprometernos y echarle muchas ganas (sin que ambas secretarias asuman la responsabilidad que les corresponde) el examen que acaba de pasar lo cambiaron de fecha e incluso en Veracruz hasta lo cambiaron de sede. La información llega un día antes a las supervisones escolares y en ese trance muchos maestros se quedan en el camino.

Yo me pregunto cuándo va a ser el día que a los docentes nos toque evaluar a la secretaría. Tan sólo las primarias deben llevar más de 100 programas alternos, ¿se imaginan? Sólo hay 200 días de clases, por eso esos programas que terminan siendo un tramite más en el papel, es imposible implementar cada uno de esos programas a cabalidad. Lo más gracioso (si nos permitimos ser irónicos) es que cada dirección de esos programas exige evidencias y fotos de que su programa fue implementado. ¿Qué acaso la SEV y la SEP no tienen bien coordinadas sus direcciones como para darse cuenta que lo que están pidiendo es un absurdo? Y lo más “chistoso” de todo es que te mandan las instrucciones un día antes de que debas entregar el reporte.

Tengo 8 años de servicio y mi decepción es cada día mayor, muchos de los maestros que tiene mi edad ya están tan decepcionados que entraron a la misma dinámica, hacemos como que trabajamos para que la secretaria haga como que funciona.

Creo que para que haya una verdadera mejora en la educación no necesitamos que los maestros compren un examen de 84 preguntas o se aprendan de memoria los libros, sino que las secretarias hagan una verdadera evaluación antes que nada de ellas mismas. Que eliminen tanto tramite innecesario, tantos programas emergente que en vez de ayudar te quitan el tiempo, que asuma la responsabilidad que les toca y sobre todo se implementen otras estrategias de evaluación menos tecnocratitas para los docentes.

Vale la pena invertir en educación, pues en la educación está el verdadero futuro y cambio de México.

imagen tomada de: www.brunoferias.blogspot.com

martes, 3 de marzo de 2009

ARTÍCULO sobre la burguesía mexicana


¿De quién son esas caras?*
por Úrsula Alanís Legaspi, socióloga de la UAM


“Al contrario de las burguesías europeas, la mexicana es totalmente ajena a cualquier idea de grandeza histórica, desconoce las maneras de consagrarse públicamente y posee una buena conciencia infinita que le hace considerar sus pequeños valores como eternos y perfectos”.
Carlos Fuentes

“Leti y Miguelito Castellanos Lascurain ofrecieron una fiesta súper fashion en un antro de súper moda en la Ciudad de México”. Como Leticia y Miguel Castellanos, personajes ficticios de este artículo, hay decenas en la vida real, que muestran sus bondades y virtudes en revistas de sociales.

Lindas caras, atuendos costosos y looks vanguardistas inundan las páginas de este tipo de publicaciones, que sin reparo alguno muestran a los supuestamente más notables de nuestra sociedad, esos que en su gran mayoría forman una clase parasitaria, pero al fin bendecida por un sistema que ha probado y comprobado ser desigual e inequitativo con la mayoría.

Cocteles, noches de casino y reuniones por demás elegantes son sólo algunas de las formas en que nuestra élite social gasta su valioso tiempo, y qué mejor manera de hacerlo notar, que a través de sus propios medios de comunicación.

La reproducción que esta selecta minoría hace de sí misma, debe avergonzar a un país como el nuestro, con más de la mitad de su población viviendo o más bien sobreviviendo con salarios de miseria. Mientras los de la Vega gastan en trivialidades y suculentos manjares, Juan Pueblo tiene que soportar los impactos del alza de la canasta básica y de los servicios de primera necesidad.

Estas revistas no sólo son bien acogidas por los socialités, también por las clases medias que añoran inagotablemente formar parte de esos círculos selectos, en donde sólo tiene cabida la gente nice, bonita, bien; la que viaja al extranjero con frecuencia, usa joyas de diseñador y se codea con gente importante, de renombre.

La identidad de la clase media parece desarrollarse en función del desenvolvimiento de la clase superior a ella, la cual se caracteriza por su espíritu segregacionista ¿En cuántas ocasiones no hemos escuchado la clásica historia del estudiante universitario clase mediero, cuyos padres decidieron inscribirlo en una universidad carísima, y según ellos de prestigio, para que se realice en otro mundo y comience a formar amistades que en un futuro le puedan ayudar a escalar posiciones? No sé ustedes, pero yo la oido decenas de veces.

No estoy en contra de la superación personal, pero si de la carencia de conciencia de clase, la cual no debería desaparecer a pesar del constante bombardeo que de imágenes y reportajes superficiales nos inundan las revistas de sociales.

Caso aparte merece la prole de nuestra burguesía política, mareada de fiebre de vanidad. Los Salinas, Zedillo y Fox, sólo por mencionar unos cuantos, no han perdido oportunidad alguna para salir del anonimato. Pareciese que ver sus rostros a color en las portadas de sociales fuese una de sus mayores ambiciones.

La sed de protagonismo de estos personajes es reflejo del increíble desequilibrio social en el que nos encontramos, en donde una de las metas que desde pequeños nos obligan a cumplir es la elevación del status.

Una de las publicaciones clásicas de este rubro ha sido, sin duda alguna, la revista ¡Hola!, la cual desde que llegó a México, a mediados de la década de los ochenta, causó inquietud entre los nuevos ricos.

En una ocasión leí en el periódico Reforma, que ¡Hola! ha llegado a vender hasta 40 mil ejemplares al mes. El dato me pareció revelador, puesto que expone el tipo de literatura que consume un buen número de la población mexicana.

Cuando las revistas de sociales salieron a luz, se mostraron preocupadas por presentar dentro de sus flamantes páginas, gente con cierta alcurnia; pero hoy día, quienes las nutren son en su gran mayoría jóvenes que viven a la sombra de sus pomadosas familias.

El proceso de asignación de roles para estos jóvenes ricos está altamente relacionado con su origen familiar, ya que heredan los roles de sus padres, madres, abuelos y parientes cercanos, con el fin último de hacer prevalecer el alto status familiar, el cual puede ser antiquísimo o de reciente creación, por lo que resulta más importante mantenerlo y acrecentarlo.

Las revistas de sociales muestran, a veces de manera sutil, que el prestigio social es la máxima recompensa personal y que los individuos estamos clasificados en categorías estratificadas, lo cual favorece la diferenciación social, mostrando como inferiores a lo que no son como ellos.

La exposición que estas publicaciones hacen de un mundo surrealista e inalcanzable para la mayoría permite preguntarnos ¿De quién son esas caras? A lo cual respondería, de aquellos que muestran las virtudes de un sistema irracional que ha sido creado por y para ellos.


* Título alusivo a los nombres de dos de las más importantes revistas de sociales a nivel nacional Quién y Caras.